jueves, 31 de octubre de 2013

¿Quién debe ser el jefe?


Cuando se creo el cuerpo humano, todas sus partes querían ser el jefe;el cerebro dijo:
- Ya que os controlo y pienso por todos, creo justo ser el jefe.
Los pies contestaron:
- Si pero nosotros transportamos a todo el cuerpo, incluido el cerebro, sin nosotros no iríais a ninguna parte. Así que debemos ser los jefes.
A lo que las manos respondieron:
- Y quien hace el trabajo? sin nosotras no ganaríais dinero ¿De qué viviríais? ¡Seremos las jefas
Y así siguieron el corazón, los ojos, la boca, las orejas, etc... y por fin....
hablo el gran ojo del culo, y también pidió ser el jefe.
el resto del cuerpo se echo a reír, ante tan absurda idea. El ojo del culo se encolerizo, se cerro y se negó a funcionar.
A los pocos días los ojos lloraban, los pies estaban cansados, las manos no tenían fuerza, incluso el cerebro tenia dolores: 
Entonces todos suplicaron al cerebro que el gran ojo del culo fuese el JEFE. Y así lo hizo.
Todas las partes del cuerpo hacían su trabajo, mientras que el ojo del culo las dirigía y se ocupaba, principalmente de la ......
MIERDA;como todo jefe digno de este cargo.

MORALEJA:No hace falta ser un cerebro para llegar a ser jefe.


Las pelotas de golf


Un profesor, delante de sus alumnos de la clase de Filosofía, sin decir ni una palabra, cogió un bote grande de vidrio y procedió a llenarlo con pelotas de golf. Después preguntó a los estudiantes si el bote estaba lleno. Los estudiantes estuvieron de acuerdo en decir que sí.
El profesor cogió una caja llena de perdigones y los vació dentro del bote. Estos llenaron los espacios vacíos que quedaban entre las pelotas de golf. El profesor volvió a preguntar de nuevo a los estudiantes si el bote estaba lleno, y ellos volvieron a contestar que sí.
Después el profesor cogió una caja con arena y la vació dentro del bote. Por supuesto que la arena llenó todos los espacios vacíos y el profesor volvió a preguntar de nuevo si el bote estaba lleno. En esta ocasión los estudiantes sonrieron y le respondieron con un sí unánime.
El profesor, rápidamente añadió dos tazas de café al contenido del bote y efectivamente, llenó todos los espacios vacíos entre la arena. Los estudiantes reían.
Cuando la risa se fue apagando, el profesor les dijo:
"Quiero que os fijéis que este bote representa la vida. Las pelotas de golf son las cosas importantes como la familia, los hijos, la salud, los amigos, el amor, cosas que te apasionan. Son cosas que, aunque perdiéramos el resto y nada mas nos quedasen estas, vuestras vidas aún estarían llenas.
“Los perdigones son las otras cosas que nos importan, como el trabajo, la casa, el coche... La arena es el resto de las pequeñas cosas.
“Si primero pusiéramos la arena en el bote, no habría espacio para los perdigones, ni para las pelotas de golf. Lo mismo sucede con la vida. Si utilizáramos todo el nuestro tiempo y energía en las cosas pequeñas, no tendríamos nunca lugar para las cosas realmente importantes.
“Presta atención a las cosas que son cruciales para tu felicidad. Juega con tus hijos, concédete tiempo para ir al médico, ve con tu pareja a cenar, practica tu deporte o tu afición favorita. Siempre habrá tiempo para limpiar la casa, para reparar la llave del agua. Ocúpate primero de las pelotas de golf, de las cosas que realmente te importan. Establece tus prioridades, el resto solo es arena".
Uno de los estudiantes levanto la mano y le preguntó que representaba el café. El profesor sonrío y le dijo: "¡Me encanta que me hagas esa pregunta! El café es para demostrar que aunque tu vida te parezca llena, siempre hay un lugar para dos tazas de café con un amigo... 


Estrellas de mar


Había una vez un escritor que vivía a orillas del mar; una enorme playa virgen donde tenía una casita donde pasaba temporadas escribiendo y buscando inspiración para su libro. Era un hombre inteligente y culto y con sensibilidad acerca de las cosas importantes de la vida. 
Una mañana mientras paseaba a orillas del océano vio a lo lejos una figura que se movía de manera extraña como si estuviera bailando. Al acercarse vio que era un muchacho que se dedicaba a coger estrellas de mar de la orilla y lanzarlas otra vez al mar. 
El hombre le preguntó al joven que estaba haciendo. Este le contestó; "recojo las estrellas de mar que han quedado varadas y las devuelvo al mar; la marea ha bajado demasiado y muchas morirán".
Dijo entonces el escritor." Pero esto que haces no tiene sentido, primero es su destino, morirán y serán alimento para otros animales y además hay miles de estrellas en esta playa, nunca tendrás tiempo de salvarlas a todas".
El joven miró fijamente al escritor, cogió una estrella de mar de la arena, la lanzó con fuerza por encima de las olas y exclamó " para ésta... sí tiene sentido".
El escritor se marchó un tanto desconcertado, no podía explicarse una conducta así. Esa tarde no tuvo inspiración para escribir y en la noche no durmió bien, soñaba con el joven y las estrellas de mar por encima de las olas. A la mañana siguiente corrió a la playa, buscó al joven y le ayudó a salvar estrellas.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Cuento árabe


A un oasis llega un joven, toma agua, se asea y pregunta a un viejecito que se encuentra descansando:
-¿Que clase de personas hay aquí?
El anciano le pregunta:
-¿Qué clase de gente había en el lugar de donde tu vienes?
-"Oh, un grupo de egoístas y malvados -replicó el joven-estoy encantado de haberme ido de allí.
A lo cual el anciano comentó:
-Lo mismo habrás de encontrar aquí.
Ese mismo día otro joven se acerco a beber agua al oasis y viendo al anciano preguntó:
-¿Qué clase de personas viven en este lugar?
El viejo respondió con la misma pregunta:
-¿Qué clase de personas viven en el lugar de donde tu vienes?
-"Un magnífico grupo de personas, honestas, amigables, hospitalarias, me duele mucho haberlos dejado."
-"Lo mismo encontraras tu aquí", respondió el anciano.
Un hombre que había escuchado ambas conversaciones le preguntó al viejo:
-¿Cómo es posible dar dos respuestas tan diferentes a la misma pregunta?
A lo cuál el viejo contestó:
-Cada uno lleva en su corazón el medio ambiente donde vive. Aquél que no encontró nada bueno en los lugares donde estuvo no podrá encontrar otra cosa aquí. Aquél que encontró amigos allá podrá encontrar amigos aquí.

La inundacion



Resulta que hay unas inundaciones y un hombre se queda en lo alto de un campanario totalmente aislado. Pasa toda la mañana y por la tarde llega una barca:
- ¡Oiga! suba que le llevamos.
- No gracias, tengo fe en Dios y estoy seguro que él me salvará.
- ¿Está seguro?
- Sí, sigan que Dios me salvará.
Pasa toda la noche y al día siguiente pasa a su lado una lancha:
- ¡Eh, oiga! suba que le llevamos.
- No, no hace falta. Soy muy devoto y Dios me salvará.
Y los de la lancha deciden no insistir. Sigue pasando el tiempo y por la tarde llega un helicóptero de la Guardia Civil, otra vez la misma conversación:
- ¡Ehhhhh! ¡El del campanario! ¿Necesita ayuda?
- No, gracias. Confío en Dios y él me salvará.
La Guardia Civil se va depués de haber intentando razonar con él y esa noche vuelve a subir el nivel de las aguas y el hombre se ahoga. Cuando va al cielo se encuentra con Dios y le dice:
- ¡Señor, Dios mío! ¿por qué no me has ayudado?
- ¡¿Qué no te he ayudado?!… te mandé una barca, una lancha, un helicóptero…

La sopa de piedras


Hubo una vez hace muchos años, un país que acababa de pasar una guerra muy dura.
Como ya es sabido, las guerras traen consigo rencores, envidias, muchos problemas, muchos muertos y mucha hambre. La gente no puede sembrar ni segar, no hay harina ni pan. Cuando este país acabó la guerra y estaba destrozado, llegó a un pueblecito un soldado agotado, harapiento y muerto de hambre. Era muy alto y delgado.
Golpeó la puerta de una casa y cuando vio a una dueña le dijo: "Señora, ¿no tendría un pedazo de pan para un soldado que viene muerto de hambre de la guerra?" La mujer lo miró de arriba a abajo y respondió: "Pero ¿estás loco? ¿No sabes que no hay pan y que no tenemos nada?, ¿Cómo te atreves?" Y a empujones, con un portazo, lo saco fuera de la casa.
Pobre soldado. Prueba fortuna en una y otra casa, haciendo la misma petición y recibiendo a cambio peor respuesta y peor trato. El soldado, casi desfallecido, no se dio por vencido.
Cruzó el pueblo de punta a punta y llegó al final, donde estaba el lavadero público. Halló a unas cuantas muchachas y les dijo: "¡Eh, muchachas! ¿No habéis probado nunca la sopa de piedras que hago?" Las muchachas se rieron de él diciendo: "¿Una sopa de piedras?; no hay duda de que estás loco"
Pero había unos chicos que estaban espiando y se acercaron al soldado cuando éste marchaba decepcionado: "Soldado, ¿Te podemos ayudar?", le dijeron.
¡Claro que sí! Necesito una olla muy grande, un puñado de piedras, agua y leña para hacer fuego". Rápidamente los chicos fueron a buscar lo que el soldado había pedido. Encendieron el fuego, pusieron la olla, la llenaron de agua y echaron las piedras. El agua comenzó a hervir. "¿Podemos probar la sopa?", preguntaron impacientes los chicos. "¡Calma, calma!" El soldado la probó y dijo: "Mmmm... ¡qué buena, pero le falta un poco de sal!" "En mi casa tengo sal", dijo un chico. Y salió corriendo por ella. La trajo y el soldado la echó en la olla.
Al poco tiempo volvió a probar la sopa y dijo: "Mmmm... ¡Qué rica!, pero le falta un poco de tomate". Daniel, uno de los chicos fue a buscar unos tomates y los trajo enseguida. En un momento los chicos fueron trayendo cosas: patatas, lechuga, arroz y hasta un trozo de pollo. La olla se llenó; el soldado removió una y otra vez la sopa hasta que de nuevo la probó y dijo: Mmmm... es la mejor sopa de piedras que he hecho en toda mi vida.
¡Venid, venid; avisad a toda la gente del pueblo que venga a comer! ¡Hay para todos! ¡Que traigan platos y cucharas!" Repartió la sopa.
Hubo para todos los del pueblo que, avergonzados, reconocieron que si bien era verdad que no tenían pan; juntos podían tener comida para todos.
Y desde aquel día gracias al soldado hambriento, aprendieron a compartir lo que tenían.

Primera clase



En un vuelo aéreo entre Johanesburgo y Londres, una señora blanca de unos cincuenta años que está sentada al lado de un hombre de color llama a la azafata para quejarse:- ¿Cuál es el problema, señora?- Pregunta la azafata.- ¿Pero no lo ve?- Responde la señora. Me colocó al lado de un negro. No puedo quedarme al lado de estos ‘inmundos’. Deme otro asiento.- Por favor, cálmese- Dice la azafata - Casi todos los lugares de este vuelo están ocupados.Voy a ver si hay algún lugar en clase ejecutiva o en primera. La azafata se apura y vuelve unos minutos después.- Señora - explica la azafata - como yo sospechaba, no hay ningún lugar vacío en clase económica. He hablado con el comandante y me ha confirmado que tampoco hay lugar en ejecutiva. Pero sí tenemos un sitio libre en primera clase.Antes de que la señora pueda responder algo, la azafata continúa:- Es totalmente inusitado que la compañía conceda un asiento de primera clase a alguien que está en clase económica, pero, dadas las circunstancias, el comandante consideró que sería escandaloso que alguien sea obligado a sentarse al lado de una persona tan indeseable...Y, diciendo eso, la azafata mira al negro y dice:- Si el señor me hiciera el favor de tomar sus pertenencias, el asiento de primera clase ya está preparado.Todos los pasajeros de alrededor, que presenciaron la escena, se levantaron aplaudiendo por la actitud de la compañía.

martes, 29 de octubre de 2013

La princesa y el guisante



Había una vez un joven príncipe en edad casadera, que decidió iniciar un viaje para encontrar una princesa con la que casarse y dar herederos a su reino. Así fue como se embarcó en un largo periplo, que le llevó a recorrer todo el mundo conocido, en busca de esa princesa verdadera con la que contraer matrimonio. En tan extenso territorio, muchas fueron las candidatas que encontró en su camino, pero ninguna tenía lo que el príncipe estaba buscando.
Una oscura noche,  en la que el cielo parecía estar a punto de derrumbarse y la lluvia golpeaba incesantemente los muros del palacio, alguien llamaba a la puerta de forma desesperada en busca de refugio.
Cuando los sirvientes abrieron la puerta, descubrieron que se trataba de una empapada y sucia mujer, que afirmaba ser una auténtica princesa, a pesar del lamentable aspecto que presentaba.
Para comprobar si era cierto lo que decía, la reina se dispuso a realizar una pequeña prueba, que consistía en meter un insignificante guisante, sin que su huésped lo supiera, entre capas y capas de colchones y edredones.
Cuando llegó el nuevo día y todos se habían levantado, la reina se interesó por cómo había pasado la noche su invitada.
-He pasado una noche terrible señora. No sé qué tendría esa cama, pero era algo de tal dureza, que me ha dejado el cuerpo en un estado tan maltrecho, como si hubiese dormido encima de unas piedras.
Al escuchar sus palabras, se dieron cuenta de que sus palabras eran ciertas y que esa delicadeza, tan solo la poseen las princesas de verdad.
Y así fue como el príncipe encontró a la mujer para casarse y como un pequeño guisante, termino mostrándose junto a las más altas joyas de la corona.

El trabajo


George Turklebaum, de 51 años de edad, que trabajaba como revisor en una
empresa de Nueva York desde hace 30 años, sufrió un paro cardíaco en la
oficina que compartía con otros 23 trabajadores.
El lunes por la mañana llegó a trabajar, discretamente, pero nadie notó que no se
marchó nunca hasta que sábado por la mañana el personal de limpieza preguntó
qué hacía trabajando fin de semana.
Su jefe, Elliot Wachiaski, declaró: "George siempre era el primero en llegar
por la mañana y el último en marcharse por la noche, por lo que a nadie le
pareció extraño que estuviera continuamente en su sitio sin moverse y sin
decir nada. Era bastante reservado y su trabajo le absorbía".
Un examen post mortem reveló que llevaba muerto 5 días tras sufrir un infarto.
Resulta irónico saber que George estaba revisando unos manuscritos médicos
cuando murió.
Por favor, de vez en cuando dale una palmadita en la espalda a tu compañero.
Y la moraleja de la historia: No trabajes demasiado. Nadie se va a dar cuenta

Hadas




Había una vez una pareja que llevaba 25 años de casada y ella celebraba su 60 cumpleaños.
Durante la celebración se le apareció una hada y les dijo que como premio por haber sido una pareja ejemplar durante 25 años,les concedia un deseo a cada uno.

La mujer pidió hacer un viaje alrededor del mundo: el hada movió su varita y zasss......aparecieron los billetes en las manos de ella.

Acontinuación fue el turno del marido.Se lo pensó un momento y dijo," bueno, me gustaría tener una mujer 30 años más joven que yo".

El hada hizo un circulo con su varita y zassss...... el marido ahora tenia 90 años.


MORALEJA: Desconfien de las hadas, al fin y al cabo,son mujeres...........

¿Dónde van?


Un grupo de pájaros en forma de "V" cruzaba el cielo cuando a una nube le picó la curiosidad y quiso saber donde se dirigían y qué planes tenían. Esperó a cruzarse en su camino y, con delicadeza, sin molestar ni entorpecer la marcha, que adivinaba que sería importante, se acercó con cuidado al último pájaro de una de las ramas de la "V" y le preguntó dulcemente:
- Dime, querido pájaro, si me lo puedes decir, ¿dónde os dirigís en un vuelo tan recto y tan largo, y qué vais a hacer allá?
El pájaro, sin dejar de volar al ritmo de sus compañeros, contestó:
-¡Ay, si yo lo supiera!. Pero no tengo ni idea. Yo no hago más que seguir a mi compañero de delante. Voy donde va él, y vuelo hacia dónde él vuela. Preguntarle a él. Él lo sabrá.
La nube se adelantó un poco, hasta llegar al pájaro de delante, y recibió la misma respuesta. Y así fue como pasando de un pájaro a otro y de una rama de la "V" a la otra, sin conseguir saciar su curiosidad.
Todos le decían que ellos no sabían nada y que preguntara a los demás, que ellos lo sabrían. Pero nadie sabía nada. Cada uno seguía al de delante, sin preguntarse nada, y no podían dar respuesta.
La nube tenía cada vez más curiosidad, hasta que no le quedó otro remedio que dirigirse al pájaro de la punta de la "V" corriendo el riesgo de molestarlo y distraerlo en su importante tarea de guía del grupo. Se disculpó, y le preguntó dónde iba con todos aquellos compañeros que lo seguían. El pájaro que hacía de guía le contestó:
- ¡Qué más quisiera yo, que saberlo! No tengo ni idea de dónde vamos. Pero todos estos me vienen empujando por detrás, y no tengo más remedio que seguir volando, aunque no sepa donde me llevan.¡Ellos lo sabrán!. Preguntales a ellos.

El escondite

 "Cuentan que una vez se reunieron en un lugar de la tierra todos los sentimientos y cualidades de los hombres.
Cuando EL ABURRIMIENTO había bostezado por tercera vez, LA LOCURA,como siempre tan loca, les propuso: --¿Vamos a jugar a los escondidos?
La INTRIGA levantó la ceja intrigada, y LA CURIOSIDAD, sin poder contenerse pregunto...
--¿A los escondidos? ¿Y como es eso?
--Es un juego --explicó LA LOCURA--, en que yo me tapo la cara y comienzo a contar desde uno hasta un millón mientras ustedes se esconden, y cuando yo haya terminado de contar, el primero de ustedes que encuentre ocupará mi lugar para continuar el juego.
EL ENTUSIASMO bailó secundado por LA EUFORIA, LA ALEGRIA dio tantos saltos que terminó por convencer a LA DUDA, e incluso a LA APATIA, a la que nunca interesaba nada. Pero no todos quisieron participar, LA VERDAD prefirió no esconderse ¿Para qué? Si al final siempre la hallaban, y LA SOBERBIA opinó que era un juego muy tonto (en el fondo lo que le molestaba era que la idea no hubiese sido de ella) y LA COBARDIA prefirió no arriesgarse...
--Uno, dos, tres.--comenzó a contar LA LOCURA.
La primera en esconderse fue LA PEREZA, que como siempre se dejó caer tras la primera piedra del camino. LA FE subió al cielo y LA ENVIDIA se escondió tras la sombra del TRIUNFO que con su propio esfuerzo había logrado subir a la copa del árbol más alto. LA GENEROSIDAD casi no alcanzaba a esconderse, cada sitio que hallaba le parecía maravilloso para alguno de sus amigos- que si un lago cristalino?
Ideal para LA BELLEZA. Que si la rendija de un árbol? Perfecto para LA TIMIDEZ. Que si el vuelo de una ráfaga de viento? Magnífico para LA LIBERTAD. Así terminó por ocultarse en un rayito de sol. EL EGOISMO en
cambio encontró un sitio muy bueno desde el principio, ventilado,cómodo... pero solo para él. LA MENTIRA se escondió en el fondo de los océanos (mentira, en realidad se escondió detrás del arcoiris) y LA PASION y EL DESEO en el centro de los volcanes. EL OLVIDO... se me olvidó donde se escondió... pero eso no es lo importante. Cuando LA LOCURA contaba 999999, EL AMOR aún no había encontrado sitio para esconderse, pues todo se encontraba ocupado... hasta que divisó un rosal y enternecido decidió esconderse entre sus flores.
--Un millón - contó LA LOCURA- y comenzó a buscar.
La primera en aparecer fue LA PEREZA sólo a tres pasos de una piedra.
Después se escuchó a LA FE discutiendo con Dios en el cielo sobre zoología y LA PASION y EL DESEO los sintió en el vibrar de los volcanes. En un descuido encontró a LA ENVIDIA y claro pudo que buscarlo, el solo salió disparado de su escondite, había resultado ser un nido de avispas. De tanto caminar sintió sed y al acercarse al lago descubrió a LA BELLEZA y con LA DUDA resultó más fácil todavía pues la encontró sentada sobre una cerca sin decidir aún de que lado esconderse. Así
fue encontrando a todos, EL TALENTO entre la hierba fresca, a LA ANGUSTIA en una oscura cueva, a LA MENTIRA detrás del arcoiris (mentira, si ella estaba en el fondo del océano) y hasta EL OLVIDOdeducir donde estaba EL TRIUNFO. EL EGOISMO no tuvo ni ... que ya se le había olvidado que estaban jugando a los escondidos, pero sólo EL AMOR no aparecía por ningún sitio, LA LOCURA buscó detrás de cada árbol bajo, cada arroyuelo del planeta, en la cima de las montañas y cuando estaba por darse por vencido divisó un rosal y las rosas... Y tomó una horquilla y comenzó a mover las ramas, cuando de pronto un doloroso grito se escuchó. Las espinas habían herido en los ojos AL AMOR; LA LOCURA no sabía que hacer para disculparse, lloró, imploró, pidió perdón y hasta prometió ser su lazarillo.
Desde entonces, desde que por primera vez se jugó a los escondidos en la tierra... EL AMOR ES CIEGO Y LA LOCURA SIEMPRE LO ACOMPAÑA".